jueves, 4 de junio de 2009

Luces en el cielo

Ya que no dispongo del tiempo suficiente para ofreceros otro destino en detalle, os voy mostrar unas imágenes igual de impresionantes sobre un fenómeno que sucede en los alrededores de los Polos del planeta Tierra.
Precisamente los círculos polares Ártico y Antártico son las únicas zonas del planeta donde se pueden observar las Auroras Polares.
Las Auroras Polares son unas luces de colores muy diversos que arrasan a lo largo del cielo nocturno de los polos formando unas figuras alargadas y ovaladas en movimiento que pueden durar desde minutos a horas.
El origen de este fenómeno tiene dos culpables: El Sol y el campo magnético de la Tierra.
Todo empieza en el Sol.
La superficie de nuestra estrella tiene una temperatura de unos 6.000 ºC, a medida que nos alejamos de la superficie solar lo normal sería que la tempertatura descendiese, pero no es así... Gracias al campo magnético del Sol, se crea una corona solar alrededor del astro que puede llegar a alcanzar temperaturas superiores a los 3.000.000ºC. La corona solar solo se puede ver cuando se produce un eclipse solar o utilizando un dispositivo capaz de ocultar la luz del sol.


En esa zona "invisible" se emiten y proyectan grandes cantidades de masa solar a todo el Sistema Solar. Dicho viento solar que contiene protones (carga positiva) y electrones (carga negativa) viaja 150 millones de kilómetros hasta nuestro planeta.


Cualquier cuerpo en movimiento con metal en el interior de su núcleo, como es el caso de la Tierra con hierro y níquel, tiene un campo magnético con su propio polo positivo y negativo. El campo magnético envuelve a la Tierra y se estrecha y adentra en los polos norte y sur.



El viento solar, con las partículas cargadas, es atraido y "resbala" por el campo magnético de la Tierra, se adentra por los polos e incide en la atmósfera. Las partículas chocan contra los átomos mas abundantes de la atmósfera (Oxígeno y Nitrógeno) y la colisión excita a esos átomos a niveles de energía tales que cuando se desexcitan devuelven esa energía en forma de luz visible.
Y de repente la totalidad del cielo se llena de bandas, espirales y rayos de luz que tiemblan y se mueven rapidamente de horizonte a horizonte.





La aurora polar del Polo Norte se llama Aurora Boreal y la del Polo Sur Aurora Austral, aunque la única verdadera diferencia entre ambas es el nombre y la localización.
Las auroras Polares sólo se pueden observar alrededor de los círculos polares más extremos de marzo a abril y de septiembre a octubre. Observar la Aurora Boreal es más factible ya que, dado que la Aurora Austral aparece solo en la desértica y aislada Antártida, solamente habría que viajar al norte de cualquier país nórdico, Islandia, Rusia o Canadá para disfrutar del un juego de luces único producido por la propia física y química de la naturaleza.





Las impresionantes gama de colores que vemos en las auroras dependen de la especie atómica o molecular que las partículas del viento solar excitan y del nivel de energía que esos átomos o moléculas alcanzan.






El sonido que producen las auroras boreales es un sonido insólito y se parece a varios sonidos conocidos; al crepitar de la electricidad estática, al caminar por encima de hojas secas, al estrujar un celofán, son extraños crujidos que acompañan a las luces de colores.
Os dejo un video para que podáis ver y oir un episodio de auroras boreales en la localidad de Salten (Noruega).


Espero que os haya gustado.
Nos vemos en el próximo destino después de examenes.




lunes, 25 de mayo de 2009

Socotra, una isla sacada de otro mundo

¿Alguna vez habéis soñado con algún lugar imposible? ¿Algún lugar que no imaginabais que podía existir en este mundo? Pues seguro que existen lugares así, aunque estén repartidos en puntos específicos de la faz de la Tierra. El lugar del que os voy a hablar es un de ellos. Un lugar en el que si te despertases, pensarías que todavía estas soñando. y lo mejor de todo esque no es solo un pequeño lugar específico, es toda una isla en la que todo es diferente, una isla con un personalidad excesiva.
Muchos de vosotros no habréis oido nunca hablar de ella, posiblemente ni os podríais imaginar un lugar así... Pero para eso está este Blog.
La isla se llama Socotra y pertenece a la República de Yemen (uno de los más antiguos centros de civilización del mundo). Es un país que me intriga de tal forma, que algún dia le dedicaré un post. Pero por ahora me centraré en su isla principal.
Socotra es un archipiélago formado por cuatro islas en el Océano Índico. La isla más grande y de la que os voy a hablar se llama Suqutrá (aunque la llamaremos Socotra)
La isla se encuentra a 250 kilómetros de Somalia, desde el cuerno de África (un cuerno al Este de África muy llamativo en un mapa) y a 350 kilómetros al Sudeste de las costas de Yemen. La isla tiene una superficie de 3.625 kilómetros cuadrados y una población de tan solo 50.000 habitantes.



Hace 10 millones de años la isla de desgajó del cuerno de África y, desde entonces, es como si el tiempo no contara. La isla va a su ritmo y eso se ve en su gente con un estilo de vida completamente rudimentario; en las casas, muchas de ellas sin electricidad ni agua corriente y sin una infraestructura básica; en el hecho de que su población se dedique a la agricultura, ganadería o a la pesca sólo para subsistencia; pero sobre todo, en una fauna y flora única en el mundo.











Socotra es la isla de origen continental (sobre la corteza continental, no la marítima) más aislado del planeta. Su clima es eminentemente árido, tanto que el termómetro alcanza temperaturas sofocantes. Pero los bellísimos paisajes hacen olvidar el calor. Y esque las condiciones geográficas de sequía y el calor sumadas a la situación de aislamiento generaron un ambiente y una biodiversidad única, con especies endémicas que han creado un mundo perdido.





Hay algo ancestral y prehistórico en Socotra que lo hace mágico, aunque en el fondo todo obedezca a las más simples leyes de la naturaleza, a la fuerza de un eterno aislamiento que ha creado una fauna y una flora que no se conoce en ninguna otra parte del planeta.







El acceso a la isla es complicado debido a las fuertes rachas de vientos y el inteso oleaje que la isla y sus alrededores sufren en algunas estaciones del año; lo que hace muy dificil el transporte marítimo. Hasta 1999 la isla estaba completamente aislada del resto de la civilización ya que no disponía de aeropuerto. Ahora, gracias a la posibilidad de poder llegar a la isla por avión, se ha convertido en un lógico atractivo turístico. En verano, desde Junio a Septiembre, los vientos en Socotra son tan fuertes que se cancelan más del 40% de los vuelos desde la capital de Yemen, Sana´a. Al llegar a la isla el calor es asfixiante, aunque se compensa gracias a unas playas con una extaña belleza que forman parte de un espectáculo natural.










Socotra tiene una importancia global por la biodiversidad que conserva: el 37% de su flora, 90% de sus reptiles y 95% de sus moluscos son especies que solo existen en esa isla. Por lo que se le ha llegado a llamar "Los Galapagos del Océano Índico". De las 825 especies de plantas, 307 son endémicas.
Los santuarios naturales terrestres, parques nacionales y áreas de especial interés botánico abarcan el 75% de la isla. Es un arca perdida por miles de años que ahora está preocupantemente amenzada por la actividad humana y la inserción de nuevas especies.













Uno de los ejemplares más representativos de Socotra es el llamado el árbol sangre de dragón (Dracaena Cinnabari) del que dicen que a su salvia roja se le atribuyen propiedades curativas. No es extraño encontrarse algunos ejemplares con incisiones en sus tallos con el fin de sustrer la salvia para realizar brebajes y ungüentos. Su forma de paraguas o seta es una de sus principales características.










También hay otros ejemplares muy interesantes: árboles con unas formas distorsionadas que parecen que esten aguantando la respiración, árboles diminutos con complejo de Peter Pan que se niegan a crecer, otros que brotan de los lugares más inauditos... árboles extraterrestres.













La fauna también es de lo más variada: la isla posee una gran variedad de aves, reptiles y moluscos únicos en la tierra. La arañera de Socotra es una especie de buitre con una corona de plumas duras y amarillas que lo convierten en un carroñero impresionante.





La isla ni siquiera cuenta con un sistema de transporte público que una las principales ciudades. La ciudad más grande se llama Hadiboh y apenas cuenta con 8.000 habitantes. Se pueden alquilar coches para recorrer la isla. Una visita que supondrá mucho más que un viaje, será una aventura en el tiempo a un lugar que pareciera no estar en nuestro planeta.









Para más información y reservas llamar al (967-1) 521-033 o enviar un e-mail a tourism@yementourism.com